martes, agosto 31, 2010

Esos dibujitos

Me encanta que los chicos se prendan con los dibujitos de La Pantera Rosa, que disfruten de Los Tres Chiflados o que descubran las aventuras de Mc Pato...
Prefiero eso antes que al pavo de Billy y Mandy, que los trágicos de Naruto o los grititos de Wow Wow Wubbzy, o como quiera que se escriba.
Eso que todavía no le mostré al más grande He-Man o a la chiquita Heidi...
Ahora tienen 24 hs de dibujitos, nosotros teníamos 2 horas, que no siempre podíamos ver enteras, será por eso que antes estábamos más afuera, andábamos en bici, trepábamos a los árboles... la atracción de las computadoras solo se asemejaba al viejo Atari, que no siempre estaba en casa, había que ir a lo de un primo acaudalado y un amigo con lo último.
Entonces, inventábamos historias con los playmobils, hacíamos armas de cartón y arcos y flechas con ramas.
Otras épocas si, que me gustaría pudieran aprovechar aunque sea esos vestigios que les traigo... en un dibujito de antaño, en un paracaídas hecho con bolsas, en un carrito de rulemanes...

miércoles, agosto 18, 2010

El hombre que hablaba demasiado


Hace unos días tuve que cubrir un acto homenaje a un hombre que había trabajado por más de 40 años en una institución deportiva. Iban a nombrar un paseo del parque de deportes con su nombre.

Hasta allí fue don Germán, con sus 93 años encima, ayudado por un andador y sostenido por una de sus hijas.

No faltaron los integrantes de la comisión directiva de la institución, amigos de toda la vida, empleados del club. Todos estaban frente al cartel que pronto descubrirían, con el nombre de don Germán.

El presidente del club hizo una breve introducción, alabando las cualidades como hombre y empleado del homenajeado y le cedió el micrófono.

Correcto Don Germán agradeció a los presentes, habló de la nueva dirigencia del club, saludó a sus amigos y cuando parecía que ya llegaba el momento de descubrir el cartel, sacar la foto e irnos todos a almorzar, siguió contando una a una, entrelazadas, una serie de anécdotas vividas a lo largo de esos 40 años.

Ahí es donde empecé a notar las caras de apuro de los participantes del homenaje. El presidente no sabía cómo cortarlo, el pinche que estaba sosteniedo la tela para que no se volara hacía malabares y multiplicaba sus manos. Un colega, algo retrasado, tenía acalambrado el brazo, alternaba su grabador de derecha a izquierda, de izquierda a derecha.

"Bueno Don German... " empezaba a decir el presidente, para cortarlo de manera educada, pero don German, dueño de una elocuencia única, seguía hablando, reía, señalaba cómplices.

Todo terminó claro, el cartel fue descubierto, se sacaron las fotos de rigor. Pero yo me fui con la amarga sensación de algo que no llegaba a pensar del todo bien.

En casa, ya más tranquila, mientras desgrababa la nota me acordaba de las loas iniciales para don Germán y de las caras de fastidio cuando el pobre viejo seguía hablando...

Todo bien, mientras no nos joda. Muy destacable su labor en el club, muy querido, muy respetado, pero cuando irrumpe con unos tiempos que ya no son de nadie, ahí pasa a ser un estorbo.

Cuántas veces la sociedad hace de lado a los mayores, los más chicos no los escuchan con la misma avidez de antes, ya no son fuente de consulta, para eso está internet.

Y hasta en sus homenajes, los últimos en vida, deben soportar la intolerancia...

martes, agosto 10, 2010

Con un toque de canela.


El otro día mientras me preparaba un tecito de manzana, canela y miel, me acordé de la película La Sal de la Vida, en donde las especias juegan un papel muy importante, donde hay que dejarse llevar por los sentidos, el del olfato, el de la vista, el gusto. Por eso les dejo estos párrafos de otros sobre la canela:
Originaria de la isla conocida como la "Lágrima de la India", Sri Lanka (antiguo Ceilán) la canela (cinnamomuin zeylanicum) se obtiene de la corteza de un árbol, el canelo, que mide entre cinco y diez metros de altura. Fue empleada por primera vez en el antiguo Egipto para embalsamar momias. En China ya era conocida y utilizada 2.500 años AC. Los griegos y romanos aromatizaban sus vinos y manjares con canela. Nerón mandó, por ejemplo, quemar toda la canela de la región en honor a la muerte de su esposa. La canela también era muy apreciada por el pueblo de Israel, y Moisés recibió la indicación divina de usarla, junto con otras especias, en el óleo santo con el que se tenían que ungir los objetos del santuario y los sacerdotes. También fue una de las especias que contribuyó indirectamente al descubrimiento de América, pues Colón partió hacia poniente a través del Atlántico, pensando que acortaría la ruta hacia la India, de donde se traía la canela, entre otros productos orientales. Durante los siglos XVII y XVIII, la canela se convirtió en la especia más lucrativa para los holandeses.
La canela, ya sea en rama o molida, se utiliza como condimento en multitud de platos, al mismo tiempo que contribuye a mejorar la salud. Algunos la consideran afrodisíaca. Es una especia de gran sabor y aroma penetrante.
Su uso favorece, especialmente, a los que padecen de: inapetencia, digestiones pesadas o flatulencia. Utilizándose, también, en el cólico del lactante. Tiene, además, propiedades estimulantes y antisépticas, de ahí su presencia en numerosas pastas dentífricas, ya que ayuda a combatir a las bacterias que provocan la carie dental y las enfermedades de las encías.
Las compresas con decocción o tintura de canela se usan para aliviar los dolores artríticos y reumáticos. La decocción se usa como estimulante y como excitante, astringente y antiespasmódico. Las inhalaciones del vapor de agua hirviendo con cinco gotas de aceite de canela se utilizan para combatir la tos y la irritación respiratoria. La dilución de 10 ml de aceite de canela en 25 ml de aceite de almendras o de girasol aplicada en forma de masaje se emplea contra los cólicos abdominales, dolores estomacales y diarrea. También se utiliza para hacer cremas contra la piel seca o con arrugas, podemos conseguir un extraordinario peeling casero con una cucharada de azúcar, otra de aceite de oliva y una pizca de canela en polvo.
Pero es en el arte culinario donde la canela se convierte en un ingrediente mágico que despierta las sensaciones más exóticas estimulando la fantasía gustativa. La canela es, fundamentalmente, la especia de los pasteleros. Europa ha hecho suyo el gusto de la canela, utilizándola en la elaboración de bizcochos, helados y dulces en los cuales se vuelve, a veces, imprescindible para conseguir un sabor intenso y característico. En el mundo oriental se utiliza, sobre todo, en la elaboración de cocina salada y como ingrediente del conocidísimo curry. En México la usan para aromatizar el chocolate líquido. La encontramos en bebidas cálidas, como ponches, en los almíbares para frutas. Muchos platos de carne al estilo del ragout, están aromatizados con canela.