jueves, enero 21, 2010

Amaneceres

A pesar de los sinsabores de la vida, siempre es bueno amanecer con una esperanza, con un mínimo rayo de luz que ilumine el camino, para no perder el rumbo, para creer en imposibles y cuando la negrura confunde con la desesperanza, siempre quedará un lugar para los sueños, esos que pueden imaginarse despiertos y que de tanto anhelarlos, se hacen realidad.

viernes, enero 08, 2010

Una salida nocturna


Los lugares grandes de veraneo tienen esas cosas, el saber que en cualquier momento puede suceder algo inesperado, divertido.
Estábamos con marido buscando por las calles de la ciudad balnearia un lugarcito lindo para cenar, hacer tiempo y luego caer en el bar donde tocaría mi hermano.
Recorríamos mirando hacia un lado y al otro cuando le digo: "mirá, ese me gusta, tiene onda".
Paramos entonces, hasta el trapito era super gauchito, amable, nos quedamos charlando un rato con él y entramos.
Era un restaurante bien ambientado, lleeeeeno de gente, tanta que tuvimos que esperar y anotarnos en una lista (en general no me gusta quedarme esperando para cenar, si está lleno busco otro), pero no se, era lindo. Conseguimos una mesita para sentarnos y con bebida en mano nos pusimos a mirar los personajes que entraban.
-Este parece productor, mirá, está con ese chico... ¿cómo se llama?, si, el que estaba con Marley...
-Mirá esa señora, apostaría todo a que es vestuarista...
y asi hasta que pudimos sentarnos, tarde, muuuuy tarde. El mozo muy servicial nos trajo la carta y ahí nuestra primer sorpresa!!
-¿Cuánto dice por un simple bife?? ¿AAHH la ensalada es aparte?? ¿Cuánto el purecito??
-Yo con media porción me arreglo, pero vos no se, o te cagas de hambre o dejas la billetera...
Bueh, la cosa no era tan grave, una porción mas que generosa que nos sirvió para compartir. Prohibido pedir cualquier vino pero yo estaba al volante, así que una gaseosa para no caer presa del control de alcoholemia.
En eso, autazo que para en la puerta. No uno, dos. ¡Qué naves!
"Mirá", le digo a marido, "ahí viene María Marta Serra Lima"
"¿si? dice él.
Cuando le conté que dos minutos después también entró María Eugenia Ritó, su interés fue otro. LLegaban los famosos, y ahí estaban, comiendose la misma espera que nos comimos nosotros antes de poder pasar.
Pero hay más, Ileana Calabró con su amado Rossi, un chico que no me acuerdo el nombre, pero que si lo ven en la tele lo reconocen...
El plato fuerte se completó con Moria, si, la diva también come en ese lugar...
Asi que ahí estábamos rodeados del mundillo faranderil, riéndonos de la prisa con la que los mozos nos antendían, claro, había que liberar mesas!!
El trapito a la salida dijo que caen por ahí el mediático Ricky Fort, Maradona, y unas cuantas estrellitas más. Una panzada de notas podría hacerme si llevase conmigo el grabador y la cámara.
De ahí cambiamos de ambiente y nos fuimos a un bar donde mi hermano tocaba. Salí sorda, será que ya no estoy para esos trotes??
Música fuerte, birras, nenas queriendo parecer grandes, lanzando todo su atrevimiento antes de llegar al baño. En fin, la juventud.
Una salida que se convirtió en una anécdota para contarles.
AH, justo ese mismo día había hecho nota con todo el elenco de Valientes en la playa.
Menos mal que no soy cholula...